La expresidenta Laura Chinchilla (2010-2014) aseguró este martes que el actual Gobierno perdió “tiempo valioso”, sin aprobar una reforma fiscal.

En su criterio, el letargo por parte de la administración de Luis Guillermo Solís podría afectar al país, previendo que al cierre de este año, se estima que el déficit fiscal sea del 5,9% del producto interno bruto (PIB).

“El inexorable fin del periodo presidencial y la indolencia inicial de las autoridades electas impidió que el proceso avanzara; se ha perdido tiempo valioso que debe ser recuperado a riesgo de nuestra estabilidad económica y social”, enfatizó.

Esas declaraciones las ofreció durante su discurso en el acto de develación de su retrato, en el Salón de Expresidentes en la Asamblea Legislativa.

Exaltó logros. Delante de excolaboradores de su gobierno, principalmente ministros y viceministros, y uno que otro diputado del actual Congreso, incluso del oficialista Partido Acción Ciudadana (PAC), Chinchilla también afirmó que los logros de su administración se están visualizando y que se siente orgullosa de su gestión.

“Es una satisfacción que no solo se mide en hechos concretos, datos precisos y logros tangibles o intangibles que estoy segura la historia irá valorando en su justa dimensión”, expresó la exmandataria.

En concreto, mencionó lo alcanzado en infraestructura, inclusión social, empleo, seguridad y defensa de la soberanía.

“La concreción de una ambiciosa cartera de inversiones en infraestructura, cuyos frutos empiezan ya a recogerse”, añadió Chinchilla.

En su intervención, además, admitió –por primera vez–, que cuando asumió la Presidencia no recibió el país, de manos de su antecesor, Óscar Arias, en las mejores condiciones. Según dijo, encontró un “estancamiento en algunos índices sociales”, así como unas “finanzas públicas debilitadas y una amenaza de quiebra de la seguridad social”.