Wilson Arroyo Castillo, de 42 años, fue hallado culpable de cuatro delitos, entre los cuales están robo agravado, violación calificada y privación de libertad; lo procesaron en el Tribunal Penal del II Circuito Judicial de la Zona Atlántica, en Guápiles. La pena de 40 años que se le impuso por los hechos ocurridos el 6 de diciembre del 2014 por la noche, en Santa Rosa de Río Jiménez, Guácimo. Esa noche, junto con otro individuo que no pudo ser identificado, entró para asaltar un bar del lugar, donde solo había dos clientes y la dependiente. Luego de amarrar y amordazar a los visitantes, los sujetos se llevaron a la mujer, de nacionalidad nicaragüense, y la violaron.
Además de quitarle la billetera a los clientes, los antisociales se llevaron ¢329.000 de la caja registradora y ¢200.000 que la fémina tenía en su bolso.
Como para celebrar el ilícito y no tener que gastar dinero en guaro, los dos tipos también se llevaron botellas de vino, whisky, ron y cervezas. Luego de amarrar y amordazar también a la víctima, la dejaron al lado de los dos hombres y huyeron del lugar en motocicleta.
En la madrugada del día siguiente, el sospechoso fue detenido en Aguas Frías de Roxana, en Pococí, cuando conducía una moto y portaba un arma tipo revólver. De su compañero de fechorías todavía las autoridades no tienen ningún indicio.
Mientras que la sentencia queda en firme, Arroyo Castillo estará en prisión preventiva.
Jorge Sancho Vargas | Martes 08 Diciembre, 2015