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>>OPINIÓNSan José, Costa Rica, Miércoles 27 de febrero de 2008, 14:39:46.


Lo que piensa una estadounidense sobre el TLC con Costa Rica

Michelle Fournier

Los efectos potenciales del Tratado de Libre Comercio en Costa Rica.

Yo siempre había pensado, tal vez por la influencia de mis clases de economía, que el libre comercio en todo el mundo es algo que debemos esperar y apoyar. Desde mi llegada a Costa Rica, donde el Tratado de Libre Comercio (TLC) es un asunto muy importante y controversial, me he dado cuenta de que la realidad del libre comercio no tiene mucho que ver con la teoría sobre el libre comercio que aprendemos en las clases de economía. En particular, me parece que la base entera del TLC está construida en el neocolonialismo de Estados Unidos. Este imperialismo económico puede tener efectos graves en Costa Rica. Entonces, con esta nueva conciencia, he escrito este ensayo como una evaluación crítica del Tratado de Libre Comercio y algunos de sus efectos potenciales en ese país.

El TLC ha sido ratificado por Estados Unidos, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Republica Dominicana. En octubre de 2007, la gente de Costa Rica votó sobre el tratado y gano el Sí, con un margen de menos del 2%. Entonces, el tratado es legal en Costa Rica. El Congreso aprobó la mitad de los 12 proyectos necesarios para poner en efecto completamente el tratado.

No puedo discutir todos los sectores que puedan ser afectados por el TLC, entonces me enfoco en los temas que a mí me interesan más: la agricultura, el medio ambiente y la salud pública. Otros de los que no voy a hablar directamente son las telecomunicaciones y la electricidad, la propiedad intelectual y el empleo.

Costa Rica tiene un sistema de salud socializado que funciona bastante bien y mucho mejor, en mi opinión, que el sistema estadounidense. La gran cantidad de inmigración ha resultado en que el sistema está sobrecargado, pero generalmente hay muchas características atractivas del sistema de salud pública en Costa Rica. Las personas protegidas dentro del sistema —todos los trabajadores y sus familias— hacen visitas a doctores y hospitales gratis, operaciones gratis y medicamentos gratis. En cambio, Estados Unidos no tiene un sistema de salud socializado y la salud no está garantizada por el Gobierno. En el país más rico del mundo, donde gastamos más dinero en la salud que cualquier otro país, hay cerca de 50 millones de personas sin seguro para la salud. Los medicamentos son increíblemente costosos y sin seguros mucha gente no puede obtener las medicinas que necesita. Los medicamentos son tan costosos en nuestro país porque las compañías farmacéuticas son muy poderosas y pueden alargar el tiempo en que no se puedan crear medicinas genéricas. Temo que lo mismo puede pasar en Costa Rica.

El TLC introducirá varios problemas con el sistema socializado de Costa Rica, el más grave es que el acceso a medicamentos
baratos (medicinas genéricas) estará comprometido. Este ocurrirá porque el TLC hará mas largo el tiempo en que estén validas las patentes sobre medicinas de marca. El resultado de este regalo a las compañías
farmacéuticas será el encarecimiento de los medicamentos en Costa Rica porque, como en Estados Unidos, no podrán hacer las medicinas genéricas aquí con tanta facilidad.

Hay un capítulo ambiental en el tratado que pretende proteger recursos como la biodiversidad, el aire, el agua, las selvas. Pero no es suficiente. El problema es que el tratado dejará demasiada libertad en manos de empresarios que probablemente no respeten la importancia del medio ambiente, por sus recursos útiles a nosotros ni tampoco por su valor intrínseco. Entonces, la puerta estará abierta para la explotación excesiva de recursos escasos y la contaminación del aire y del agua. Además, el tratado efectivamente quitará el control de comunidades costarricenses sobre su medio ambiente con respecto a desarrollo económico y empresas que afectarán al ambiente. El TLC tendrá más fuerza jurídica que las leyes de Costa Rica. Entonces, si Costa Rica quisiera hacer una ley que protegería a los recursos del agua, por ejemplo, no podría hacerla si limita el libre comercio entre los países.

Por ejemplo, en Guanacaste hay hoteles que han sido construidos para acomodar el turismo, que es importante para la economía de este país. Pero los hoteles que tienen campos de golf usan el agua —un recurso escaso en el verano— para regar los campos, y entonces no queda suficiente agua para el uso de las comunidades, que obviamente también la necesitan. Por supuesto, esta
tragedia ha ocurrido antes de la ratificación del Tratado de Libre Comercio y no es un resultado de él, pero para mí representa una tendencia que aumentará mucho con la implementación del acuerdo.

Con los otros dos asuntos, los efectos del TLC en Costa Rica, aunque no sean simples de ninguna manera, no son muy complicados de adivinar. No creo que esto sea el caso con los efectos del TLC en la agricultura. La realidad será que los granjeros y pequeñas cooperativas costarricenses tendrán que competir directamente con las grandes empresas agrícolas estadounidenses. Competir con la agricultura de ese país es algo espantoso, aun para países desarrollados. No entiendo cómo un país tan pequeño y con muy poca infraestructura puede aspirar a hacerlo.

Para entender mejor los resultados potenciales de la interacción entre Costa Rica y Estados Unidos bajo el TLC, utilizo como ejemplo el caso del maíz en México, que entró en un tratado similar al TLC entre Estados Unidos, Canadá, y México, que se llama el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (Tlcan), en 1992.

El maíz es un producto básico de la dieta de muchos mexicanos, especialmente los que carecen de adecuados recursos
económicos (pobres). Ciertas comunidades han cultivado el maíz por cientos de años. Entonces, el tratado abría el camino para la importación de maíz mas barato que el maíz mexicano por todas las subvenciones de la agricultura, la tecnología y la infraestructura de Estados Unidos. Muchos de los granjeros tradicionales de México simplemente no podrían competir. Pero la situación no era y todavía no es tan simple como suena. La importación de maíz subvencionada a México ha bajado el precio de este producto, que puede ser visto como algo positivo: los pobres pueden comprar más maíz. Pero también significa que los mexicanos están expuestos a todos los caprichos del comercio internacional. Actualmente, el precio del maíz está aumentando mucho por el uso de este producto en Estados Unidos para hacer etanol. Entonces, el precio también sube en México, los pobres pueden comprar menos maíz y esto favorece a los granjeros pequeños.

Obviamente Costa Rica no es México. El TLC seguramente afectará a este país de manera distinta, pero como México, Costa Rica tiene granjeros y cooperativas pequeñas que serán perjudicados por tener que competir directamente con la agricultura subvencionada de Estados Unidos. Como parte de la red de comercio, los costarricenses tendrán que pagar para la comida el precio que el mercado internacional establece, que puede ser mejor un día y peor el próximo. Para explicarlo en otras palabras, es posible que Costa Rica pierda la seguridad de que produce comida básica dentro del país.

Finalmente, quisiera por lo menos decir que sí hay ventajas del Tratado de Libre Comercio para este país. Si fuera completamente horrible para Costa Rica, no lo habría firmado. Pero no me parece que las ventajas del tratado estén orientadas hacia la gente común, de las clases media o baja. La subida del precio de medicamentos no afectará a las clases más ricas, pero puede hacer mucho daño a la gente común y el sistema de salud pública que actualmente funciona en Costa Rica. Las ventajas para Estados Unidos también caen en muy pocas manos. Las compañías farmacéuticas son los ganadores y no puedo pensar en ningún beneficio para la gente común estadounidense. Costa Rica será otro pueblo perjudicado por los intereses de una empresa transnacional.

Entonces, las desventajas del Tratado de Libre Comercio me parecen más graves e importantes que las ventajas. Los beneficios servirán para aumentar la diferenciación económica en ambos países. Pero lo que me molesta más sobre el TLC es que los costarricenses que más necesitan ayuda de su Gobierno la verán sacrificada.





 



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